El tiempo se le acaba los nervios renacen y sus ganas por luchar y comerse el mundo no se terminan de agotar.. Pero nunca pensó que se quedaría en el camino.. siempre soñaba la realidad de su meta.
Millones de palabras sin sentido.. alas 11 de una noche cualquiera y ella con sus apuntes de Filosofía embriagante por encima de sus piernas.
Nadie la entiende ni ella misma lo sabe, 10 minutos de éxtasis y alegría que no compensan los otros 40 de desaliento.
Consejos y mas de ellos mismos.
Ganas de un futuro brillante y de estar en la mejor fiesta de la capital, con ese vestido de media espalda al aire y una copa de vodka en su mano.. rodeada de amores de una noche y suspiros por lo que nunca pasara.
Su pelo enredado en un moño medio caído no muestra sus menos ganas de no hacer nada.. busca mil métodos de enlazar esos términos indefensibles de filosofía aterrante..
Pero siempre tiene un minuto para el, para escribir no menos de un verso y no mas de 100, para acordarse de sus ojos y de lo mucho que extraña su sonrisa.
Vuelve al mundo baja a la tierra y se da cuenta que si no lucha no consigue.
Sus ganas de comerse el mundo no disminuyen, aumentan como la espuma en una copa de un típico champagne francés, que quien no lucha no merece lo que sueña.
y hoy por hoy.. solo me puedo decir.. QUE SIGA LA VIDA. QUE ELLA SABRÁ DONDE VAMOS.
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